El lunes 9 de septiembre, docentes y estudiantes de más de 4 mil instituciones educativas de todo el país reflexionarán alrededor de la jornada La Educación Abraza la Justicia y la Restauración.

Es una nueva jornada con la que organizaciones de la sociedad civil, el Ministerio y las Secretarías locales de Educación se plantean como objetivo llevar a las instituciones educativas las reflexiones sobre el sistema integral para la paz una interpelación sobre lo que el Informe Final de la Comisión de la Verdad (CEV) le deja a la sociedad.

En ese sentido, la verdad, las víctimas, la búsqueda de desaparecidos, la justicia y la restauración hacen parte del universo temático que han abordado las jornadas.

En la del 9 de septiembre, el foco estará puesto en la justicia y la restauración, porque también las instituciones educativas tienen en el enfoque restaurativo otro camino para enseñar a dirimir los conflictos y asumir las responsabilidades frente a hechos que vulneran los derechos de los otros.

Para la jornada, que tendrá lugar en el marco de la Semana por la Paz, Educapaz ha preparado guías metodológicas para primaria y bachillerato, y junto con otras organizaciones de la sociedad civil ha propuesto una actividad simbólica para “reparar el corazón”. El contenido de las guías y la actividad complementaria se encuentra disponible para su consulta y uso, aquí: https://bit.ly/4dPlvx7

En primaria el énfasis estará puesto en la reparación de los daños y las afectaciones de los conflictos cotidianos. En bachillerato el diálogo estará centrado en los diferentes modelos de justicia, y en un primer acercamiento a la justicia transicional con enfoque restaurativo. Finalmente, en los programas de formación complementaria se sugiere una ruta para abordar las prácticas restaurativas escolares.

¿Por qué vale la pena sumarse a esta jornada?

Porque propiciar escenarios de aprendizaje escolar sobre la justicia a partir del conflicto armado, ayuda a los estudiantes a conocer la historia de su país, comprendiendo tanto las condiciones como los presupuestos sobre los que opera la justicia transicional y restaurativa. Además, da inicio a una deliberación colectiva profunda sobre este y otros procesos, incluidos los de la escuela y los de la vida cotidiana. Los niños, niñas y jóvenes tienen mucho por decir sobre la guerra, así como sobre la paz. Asimismo, les asiste el derecho a ser agentes activos de la transformación que anunció el Acuerdo Final para la Paz.

Porque Colombia es un país que necesita buscar estrategias de sanación, acompañamiento y cuidado para que millones de personas que han vivido estos flagelos y la sociedad en su conjunto, curen poco a poco sus heridas. En este camino, las escuelas tienen un papel fundamental; son escenarios que pueden fortalecer solidaridades y tejer nuevas historias desde las aulas diversas.

Cabe resaltar que la realización de la jornada no es obligatoria y los colegios, escuelas y centros educativos pueden decidir sumarse o no a esta iniciativa.